Recuerdo cuando niño, al tipo del triciclo con unos 5 balones de gas, pedaleando y golpeando la parte superior del balón para avisar, con este ruido de su presencia, a los potenciales clientes.
Luego fueron los camiones, reemplazando a este triciclo de tracción humana, con un tipo en la parte de atrás que bajaba los balones, y con un fierro golpeaba entre ellos gritando "¡¡¡eeeeel gaaas!!!".
Los días cambiaron drasticamente el día que aprendieron a conectar la radio a un altoparlante en aquel camión. Aquel hombre del fierrito que le pegaba a los balones fue reemplazado por un anuncio hablado, "¡Gasco Gasco Abastible Codigas! ¡De 12 de 15 y de 45 kilos!". Hasta ese día, todo parecía normal, una evolucion probable, pero un día, todo cambio.
Imaginense como suena ese tema, con un "¡Gasco Gasco Abastible Codigas! ¡De 12 de 15 y de 45 kilos! Con la calidad de su camión repartidor de Gas" con la calidad de sonido de un parlante tipo corneta.
Para mis adentros deseaba con todas mis fuerzas que esto acabara así, pero con horror, debo reconocer, que me he despertado en las mañanas con la misma frase del gas, pero con un tema de fondo que no esperaba, un reggeaton, tan extraño, corto e inaudible que aun no se que dice, solo escucho unas voces tipo "aeeaae ea aea" un fondo propio del reggeaton, y un dolor de guata y vergüenza de no tener gas por cañería.
Ingenuo me sentí al recordar, como de adolescente con mis amigos imaginabamos a Lars Ulrich haciendo un solo de balones de gas al mas puro estilo Master of Puppets.
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